Este miércoles, ante la Sesión Pública Ordinaria en el congreso del estado, se aprobó reformas que obligan a los prestadores del servicio de transporte público, a garantizar los primeros cuatro lugares a personas con discapacidad, adultos mayores y mujeres embarazadas.
De acuerdo al dictamen aprobado que reforma la ley del Transporte, los prestadores de dicho servicio deberán plasmar la rotulación y leyendas que identifiquen los cuatro primeros asientos próximos a la entrada para que sean destinados a este grupo de personas.
Lo anterior aplicará para el transporte público que cuente con más de 12 asientos destinados al pasaje.
“Brindar protección, seguridad y ayuda a los grupos vulnerables del estado, ello ocupa un espacio importante en lo especial a este grupo de personas”, señalo el diputado del Partido Acción Nacional, Luis René Cantú Galván.
Actualmente, en el transporte público cualquier usuario puede ocupar los primeros asientos, y cuando un adulto mayor, una persona con discapacidad o mujer embarazada aborda, son pocos los pasajeros que optan por cederles el asiento, con este nuevo dictamen aprobado se les obligara a los usuarios a conceder el asiento.