Tras anunciar detalles de su retorno a los escenarios con su primer concierto streaming el próximo 7 de marzo desde el Auditorio Telmex a las 20:30 horas, Julión Álvarez explicó en conferencia de prensa virtual qué ha pasado con su proceso legal en Estados Unidos tras ser acusado y/o vinculado con investigaciones sobre lavado de dinero.
El cantante recordó que desde 2017, tras ser señalado por las autoridades estadounidenses, su carrera ha enfrentado diversos desafíos al no poder trabajar en Estados Unidos y que sus principales canales de difusión en las redes sociales más populares fueran canceladas; detalló que actualmente su proceso en Estados Unidos está retrasado a raíz de la pandemia.
«En Estados Unidos es un señalamiento donde se nos está investigando, que desgraciadamente se retrasó, la noticia de mis abogados americanos cuando empieza la pandemia fue esa, que ha suspendido operaciones, que será un poco lento. Por mi parte me siento tranquilo, estoy seguro y sé el camino que recorrí y tengo la fe y tranquilad que en cualquier rato se nos da un resolución que sea favorable».
Julión Álvarez detalló que su debut vía streaming será desde el Auditorio Telmex por cuestiones de logística y mayor comodidad para su equipo de trabajo, además de que actualmente tiene a la capital tapatía como residencia. Añadió que el concierto será gratuito y aprovechará para compartir algunas de las 18 nuevas canciones que grabó durante la pandemia en compañía de su Norteño Banda y con el festeja 14 años de historia y 19 años como cantante desde que migró desde su natal Chiapas hasta Mazatlán.
Julión Álvarez charló por primera vez los motivos que desencadenaron el ser investigado por las autoridades estadounidenses, al recordar que en hace años tuvo la intención de invertir en el desarrollo de un complejo habitacional, y tras desacuerdos con sus entonces socios, optó por retirarse del proyecto, sin embargo, su nombre quedaría vinculado. Confía en que conforme se resuelva su caso tenga un fallo a su favor.
«En su momento no lo platiqué porque los licenciados me decían que no hable. El caer en una lista como en la que yo me encuentro (Unidad de Inteligencia Financiera en México, y el Departamento del Tesoro en Estados Unidos) son cosas que desgraciadamente uno desconoce. Yo empiezo a crecer mis números, me empieza a ir mejor y empiezo a querer diversificar, lo invertí en ranchos, en tierras».
«Una de esas inversiones fue en desarrollar un fraccionamiento, en ese yo le entro en sociedad con otras persona para poder desarrollarlo. Él compra terreno, yo invierto para urbanizar y desarrollar con la intención, de en dos años, ganarnos una cantidad, como todos, queriendo hacer un negocio».
El cantante explicó que el terreno en cuestión había pertenecido a una inmobiliaria relacionada con diversas familias en años anteriores: «yo tengo las inversiones con base a salidas de mi empresa artística donde se generaron los centavos, de ahí capitalizó la inmobiliaria con la que urbanicé ese proyecto, no pasó más de un año y tengo diferencias con el socio en el 2013, llegamos a un acuerdo».
Julión detalló que al hacer sus cuentas y considerar las ganancias que podría recuperar a corto plazo y contrastar con los ingresos que lograba trabajando de jueves a domingo con conciertos abarrotados, prefirió cortar con el proyecto y ante notario participó en una asamblea para hacer el cambio de socios.
«Se firma un adeudo, en 2015 me empiezan a pagar y el seguimiento de dinero que traía desde los dueños anteriores del terreno en el que se desarrolló ese fraccionamiento, me afectó porque ya había pagos e ingresos a mis cuentas. Así de fácil está relacionarse, lo comentó públicamente porque es un ejemplo de cómo puede uno caer, enredarse o ser parte de estas listas, que no es nada fácil poder salir. Todo por querer diversificar en cuestión económica y negocios».
Los retos
Julión Álvarez explicó que a raíz de estos señalamientos no solo ha padecido la ausencia y desaparición de diversas herramientas y rutas de trabajo, pues personalmente ha experimentado discriminación ante estas acusaciones al recordar que incluso se le negó atención en un restaurante o que familiares también estuvieran bajo investigación.
«El reto más grande que hemos enfrentado a partir de los señalamientos, es seguir y mantenernos en el gusto del público, eso fue parte del trabajo que hicimos desde que arrancamos en el 2007 al 2017, cuando fueron los señalamientos, de ahí para acá es competir sin herramientas, con muchas limitaciones, es una tarea difícil».
«Es un compromiso con mi familia, medios de comunicación, a lo mejor muchos no sé si pensaron o creyeron vivir engañados por una persona a lo mejor doble cara o con una actividad diferente a la que les había presentado (…) ahora tengo dos niñas chiquititas que no sé qué venga para ellas, el ser rechazadas o criticadas o algo por ser mis hijas, las hijas de cómo me tienen ahorita, de un testaferro de alguien señalado por el Gobierno de Estados Unidos. Ya me tocó a mí vivir la cuestión de discriminación en más de una ocasión».