A través de la Secretaría de Salud, el gobierno de Rocío Nahle entregó mediante adjudicación directa contratos por más de 400 millones de pesos a empresas que ya habían sido señaladas en la revisión de las cuentas públicas de 2023 por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) por tener irregularidades en los servicios otorgados.
Los contratos fueron pagados con recursos federales del IMSS Bienestar, pero firmados por el secretario de Salud de Veracruz, Valentín Herrera Alarcón, así como por David Jahziel Pérez, subdirector de Recursos Materiales.
Fueron otorgados a las empresas Biodist, Casa Plarre, Brain Global Health Tech y Limpieza Especializada Industrial y Hospitalaria (LEIH), para pruebas de laboratorio, servicios de anestesia, suministros de insumos de laboratorio y servicios de arrendamiento de equipo en unidades hospitalarias.
La reciente auditoría forense de la ASF, sobre la que Proceso publicó un reportaje en su edición impresa de abril del presente año, señaló que estas empresas contratadas durante el gobierno del también morenista Cuitláhuac García acumulaban cuentas por aclarar que representaron más de 900 millones de pesos, por irregularidades en servicios subrogados.