Un periodista estadounidense fue arrestado por las fuerzas de seguridad venezolanas, que lo sacaron de su apartamento el miércoles temprano en medio de la agitación política en el país, dijeron abogados y grupos de libertad de prensa.
Un grupo de cinco hombres, vestidos con uniformes negros y portando una orden escrita, exigió la entrada al edificio de apartamentos de Caracas del periodista estadounidense Cody Weddle, dijeron vecinos. Ellos salieron dos horas después con Weddle, nacido en Virginia, que llevaba una maleta grande y una bolsa para equipamiento.
«No dijo nada», indicó el portero del edificio, Juan José Araque, sobre Weddle. «Salió callado».
Desde comienzos de año, Venezuela ha sido sacudida por disturbios políticos que a veces estallan en violentas protestas callejeras después de que el líder opositor Juan Guaidó, respaldado por Estados Unidos, anunciara que asumía las competencias presidenciales de Nicolás Maduro, al que acusa de «usurpador» de funciones, argumentando que fue reelecto en unos comicios fraudulentos.
El aparente arresto de Weddle se produjo el mismo día en que Maduro ordenó la expulsión del embajador de Alemania luego de que expresara su apoyo a Guaidó, aumentando el enfrentamiento diplomático con un grupo de unas 50 naciones que reconocen al líder opositor como presidente interino del país.
Weddle ha reportado desde Venezuela por más de cuatro años, trabajando más recientemente como periodista independiente para la filial de ABC en Miami, un bastión de exiliados venezolanos, aunque también ha contribuido al Miami Herald y al Telegraph del Reino Unido. Llegó al país como corresponsal en inglés de la red estatal Telesur.
El asistente venezolano de Weddle, Carlos Camacho, también de una manera similar, fue sacado de su casa en el centro de Caracas, informaron los medios locales.
No está claro qué llevó a los funcionarios a detener a los dos periodistas.
Marco Ruiz, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Prensa de Venezuela, dijo en Twitter que los funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar le confirmaron que los periodistas estaban bajo la custodia en ese cuerpo encargado de neutralizar las amenazas a la seguridad nacional.
Ambos hombres estaban siendo interrogados, dijo Ruiz, y agregó que los funcionarios no proporcionaron más detalles.
Foro Penal, una cooperativa de abogados que maneja casos delicados desde el punto de vista político, dijo que Weddle estaba detenido en una prisión en Caracas junto con algunos de los más fieros oponentes de Maduro, así como otros cinco ciudadanos estadounidenses, todos ellos con doble nacionalidad, que trabajaban en Citgo, la filial estadounidense de la estatal Petróleos de Venezuela S.A. (PDVSA), en Houston.
Espacio Público, un grupo de defensa de los medios con sede en Caracas, dijo que 49 trabajadores de los medios de comunicación han estado detenidos en Venezuela durante los últimos dos meses, una señal de la erosión de la libertad de expresión en el país sudamericano. Muchos son liberados después de unas pocas horas, aunque al menos un reportero, Billy Six, nacido en Alemania, ha estado detenido desde noviembre por lo que su familia dice que son falsas acusaciones de espionaje.
Un equipo de periodistas estadounidenses liderado por Jorge Ramos de Univisión a fines de febrero dijo que les habían incautado su equipo de videos y teléfonos en el palacio presidencial de Venezuela después de que Maduro terminara una entrevista de manera abrupta.
Ramos, uno de los periodistas de habla hispana más influyentes, dijo que Maduro interrumpió la entrevista después de 17 minutos cuando le mostraron un video en su iPad, grabado el día anterior, en el que se ve a jóvenes venezolanos que comían restos de comida de la parte trasera de un camión de basura.
Sherry Weddle, residente de Virginia, dijo que le escribió a su hijo mensajes de texto el miércoles por la mañana, una rutina diaria que han mantenido, especialmente desde que la agitación ha aumentado en el país sudamericano donde vive su hijo, de 28 años. Esta vez ella no recibió respuesta.
Por lo general, responde, ‘estoy bien. ¿Tú estás bien? «, dijo la madre. «Estoy muy preocupada».
El Departamento de Estado estadounidense dijo en un comunicado que está al tanto de la desaparición de un periodista, sin nombrarlo, y advirtiendo al gobierno de Maduro que «el mundo está observando».
«Ser periodista no es un delito», dijeron los funcionarios estadounidenses. «La libertad de expresión sigue estando amenazada en Venezuela por el régimen de Maduro».
E. R. Bert Medina, presidente y director ejecutivo de la filial de ABC en el sur de Florida, dijo en un comunicado que no poderse comunicar con Weddle era inquietante.
«(Nosotros) obviamente estamos muy preocupados por él», dijo el ejecutivo televisivo. «Cody se ha dedicado y comprometido a contar la historia en Venezuela a nuestros televidentes aquí en el sur de la Florida».