Culiacán, Sinaloa— La tarde del domingo 8 de junio no fue como cualquier otra para los vecinos del oriente de Culiacán. La tranquilidad habitual del bulevar Agricultores —también llamado Malecón de los Pobres— se convirtió en zona de guerra cuando el estruendo de las ráfagas irrumpió en plena luz del día.
El reloj marcaba las 7 de la tarde cuando comenzaron las llamadas de auxilio. Desde distintas colonias —Amistad, Guadalupe Victoria, Siete Gotas, Villa Satélite, El Barrio y San Juan— vecinos reportaban lo mismo: disparos, persecuciones, hombres armados y una sensación generalizada de terror.
En cuestión de minutos, el área fue tomada por fuerzas de seguridad: elementos del Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Policía Estatal Preventiva arribaron en convoy, respaldados por un helicóptero militar que sobrevoló la zona para contener una escena aún difusa.
El epicentro de la violencia fue una gasolinera en el cruce del bulevar Agricultores y la calle José Vasconcelos. Ahí quedaron dos vehículos con múltiples impactos de bala. Dentro de uno de ellos, un Nissan Sentra negro, yacían los cuerpos sin vida de dos hombres aún sin identificar. A su alrededor, armas largas, chalecos tácticos y cargadores daban pistas de un enfrentamiento armado a gran escala.
Otro auto, un sedán dorado de modelo viejo, fue hallado abandonado y con huellas de colisión. Hasta ahora, se desconoce si pertenecía a los agresores, a las víctimas o si simplemente quedó atrapado en medio del fuego cruzado.
La cifra preliminar: dos muertos, al menos tres heridos —entre ellos, una posible víctima colateral— y un arsenal incautado en plena zona urbana. Los lesionados fueron identificados como Deiby Armando “N” (42), Víctor Daniel “N” (23), Brayan Yahir “N” (20) y Jonathan Fernando “N” (27).
Hasta el cierre de esta edición, las autoridades no han confirmado si se trató de un enfrentamiento entre grupos del crimen organizado o una reacción directa a un operativo de las fuerzas del orden. Lo cierto es que los disparos no se limitaron a un solo punto. En diferentes sectores de la ciudad —y también en Navolato— se reportaron acciones policiales simultáneas, detenciones y aseguramientos.
En la colonia Rosario Uzárraga, un vehículo con tres ocupantes —dos hombres y una mujer armados— fue interceptado por la Guardia Nacional. Viajaban en una unidad robada y portaban armas largas y cortas, además de cargadores y cartuchos.
Mientras tanto, en Navolato, el Grupo Élite localizó otro vehículo con reporte de robo, y en la colonia López Mateos de Culiacán, un motociclista fue detenido con dosis de cristal y marihuana tras intentar escapar de las autoridades.
Culiacán vivió un domingo más bajo la sombra de la violencia, esa que aparece de forma repentina, en cualquier calle y a plena luz del día. Una ciudad donde la línea entre la rutina y el miedo es cada vez más delgada.