En su editorial Desde la fe, la Iglesia católica aseguró que el hallazgo del rancho Izaguirre en Teuchitlán, Jalisco debe indignar y advirtió que «hemos dejado de escuchar a quienes sufren».
Agregó que la desaparición forzada de personas y observar a miles de madres, padres, hermanos, hermanas, abuelas, abuelos, buscando a sus familiares secuestrados por la delincuencia también son hechos que deben de indignar.La Iglesia señaló que «tantas veces nos hemos indignado a causa de la violencia que dejamos de indignarnos» y advirtió que, en medio del ruido ensordecedor de cifras, dolor y hechos violentos, dejamos de escuchar a quienes sufren.