Entre gritos de emoción de fans que buscaban una fotografía o estar lo más cerca posible, Leonardo DiCaprio enamoró la noche de ayer en la presentación de la película “Una batalla tras otra” en la Ciudad de México.
El actor visitó el país junto a Benicio del Toro y Chase Infiniti, compañeros de reparto, además del director Paul Thomas Anderson, con quienes además tuvo una serie de actividades de promoción que incluyeron una visita al Monumento de la Revolución.
Contrario a lo usual, esta vez DiCaprio optó por una vestimenta casual y sencilla en colores oscuros, pero no por ello faltó de elegancia.
En su visita a la Ciudad de México presumió su conocimiento del idioma, al estar cercano a la comunidad latina en Los Ángeles.
“Practiqué el español y vivo en una comunidad mexicana como es Los Ángeles. En el rodaje tuvimos una gran comunicación y estuvimos rodeados de personas reales”, explicó DiCaprio, mirando a su compañero de reparto, el puertorriqueño Benicio del Toro, con quien comparte diálogos en español durante el metraje.
PELÍCULA SIN AGENDA POLÍTICA
El actor Leonardo DiCaprio aseguró que “Una batalla tras otra” es una sátira crítica y revolucionaria hacia las recientes políticas migratorias de Estados Unidos promovidas por el presidente Donald Trump, aunque según el intérprete, este thriller que retrata al Ejército norteamericano y los sectores más conservadores del país no incluye una agenda política.
“No hay agenda política en la película, pero sí habla de un mundo confuso y extremo en el que se encuentran estos personajes. Lo que más me gusta es lo revolucionario que es el personaje y su responsabilidad que tiene como padre, que no es tradicional”, respondió el actor de 50 años.