Ciudad de México—Tras años de especulación, silencios estratégicos y titulares fragmentados, Ninel Conde decidió hablar. Frente a las cámaras de Yordi Rosado, la actriz y cantante ofreció por primera vez un testimonio completo sobre su relación con Larry Ramos, el empresario colombiano acusado de fraude millonario y prófugo de la justicia estadounidense desde 2021.
“Nunca me casé con él legalmente”, aseguró con firmeza. La ceremonia que compartieron fue simbólica, de carácter religioso, y no tuvo validez civil. Ese detalle, apenas revelado públicamente, resultó clave cuando Ramos fue señalado por el FBI como el autor de un esquema de fraude que afectó a más de 200 personas, incluida Alejandra Guzmán, quien perdió cerca de cuatro millones de dólares.
Conde relató que la fuga de Ramos —cuando este se retiró el grillete electrónico que lo mantenía en arresto domiciliario— ocurrió mientras ella estaba en la habitación contigua. No ofreció detalles, pero adelantó que ese episodio será parte de un reality show que está produciendo. “La escena la vas a ver en mi reality show”, comentó, abriendo la puerta a un relato aún más íntimo.
Durante la entrevista, Ninel no evitó las preguntas incómodas. Reconoció que desconocía los antecedentes de Ramos y que él se presentó como una víctima, negando cualquier problema legal. “Nunca fue sincero conmigo. Él encubrió todo”, dijo. Cuando llegó la caída, ella quedó atrapada en una espiral de deudas, abandono y desgaste emocional. “Me fregó lana, me fregó el corazón, me fregó las emociones”, sentenció.
La cantante explicó que el lugar donde vivían —que Ramos le hizo creer que era suyo— estaba rentado y con meses de adeudo. “Me tuve que salir corriendo… en un país que no es tu país, con una realidad que resultó no ser cierta”, dijo con la voz quebrada.
Lo que más le dolió, sin embargo, no fue lo económico. Fue el abandono. “Yo tenía serios problemas con el miedo al abandono y hacía lo que fuera para que no me dejaran”, reveló al conectar el episodio con heridas de infancia, especialmente la muerte de su padre cuando tenía tres años. Ese patrón, explicó, la ha llevado a asumir roles que no le corresponden: protectora, proveedora, rescatadora emocional.
“Hay muchos encantadores de serpientes en este mundo… ahora lo entiendo, en ese momento no”, dijo, en un análisis retrospectivo de la dinámica con Ramos.
Más allá del daño emocional, la relación también tuvo consecuencias legales. Según Conde, su vínculo con Ramos fue utilizado en su contra en el juicio por la custodia de su hijo Emanuel, fruto de su relación con Giovanni Medina. “Me costó lágrimas, me costó dinero, y me costó perder puntos en el juicio”, confesó.
Aunque muchos la señalaron, Ninel sostiene que también fue víctima. “No fui cómplice. También me mintió a mí”, insistió, y agregó que desde el día de la fuga no ha vuelto a tener contacto con Ramos. “Fue un caos y un infierno”, resumió.
Mientras Larry Ramos continúa prófugo, el “Bombón Asesino” busca cerrar ese capítulo a través de un reality show autobiográfico. Asegura que no es una versión más de La Casa de los Famosos, sino un proyecto personal donde mostrará su historia, sus decisiones y sus errores.
“Quiero que la gente conozca ese momento y se puedan ver en mi espejo. A lo mejor, así no caen tan fácil”, concluyó.
