Ciudad de México.– En un testimonio sin filtros, la cantante mexicana Alicia Villarreal habló públicamente por primera vez sobre la agresión física que sufrió por parte de su expareja, el músico Cruz Martínez, en lo que describió como “el año más difícil de su vida”.
Durante una entrevista con la periodista María Julia Lafuente, Villarreal reveló que vivió un episodio de violencia que incluyó golpes y un intento de ahorcamiento. La intérprete señaló que el ataque fue sorpresivo y brutal, dejándola con secuelas físicas, emocionales y psicológicas. “Me pescó de sorpresa. Actuó con violencia, sin control. Sentí que mi vida estaba en peligro”, relató.
La cantante también confesó que durante un concierto en Michoacán, en plena crisis emocional, hizo una señal de auxilio con la mano, gesto que pasó desapercibido para muchos pero que, dijo, “era un grito silencioso”. La escena fue captada en video y más tarde se volvió viral en redes sociales.
Además del impacto físico, Alicia habló del miedo persistente con el que ha vivido desde el incidente. “No sabía si iba a regresar a casa. Pensaba en mis hijos llorando sin saber qué me había pasado”, compartió con la voz entrecortada. En este contexto, destacó que ya inició un proceso legal y agradeció a la fiscalía por haber escuchado su caso.
Aunque reconoció que la exposición pública ha sido dolorosa, especialmente por los comentarios hacia su hija Melanie, dijo que se mantiene firme y acompañada por el apoyo incondicional de sus hijos. “Mis dos hijos varones han estado conmigo, sin hacer preguntas, simplemente estando ahí”, explicó. Sobre Melanie, comentó que ya no vive con ella desde diciembre, pero “siempre ha estado presente”.
En la entrevista, Villarreal también se refirió a la colaboración profesional entre sus dos exparejas, Cruz Martínez y Arturo Carmona. Aunque evitó profundizar, no ocultó su percepción: “Uno se deja manipular y el otro quiere tener el control”.
Más allá del caso personal, Alicia usó el espacio para hacer un llamado urgente a la justicia y la empatía. “Las mujeres necesitamos ser escuchadas. Ni siquiera hemos llegado al 15% de lo que merecemos en términos de atención y justicia”, afirmó.
Con este testimonio, Alicia Villarreal se suma a la lista de mujeres del medio artístico que rompen el silencio para visibilizar la violencia de género. Su mensaje, crudo pero valiente, busca no solo justicia para ella, sino también encender una conversación social más amplia sobre el acompañamiento, la protección y la dignidad de las víctimas.