Donald Trump contrata a controvertidos abogados para su juicio político

Uno es un exfiscal que rechazó procesar al actor Bill Cosby por agresión sexual. Y el otro sigue convencido de que el financiero Jeffrey Epstein no se suicidó en prisión. El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, eligió a dos controvertidos abogados para representarlo en su juicio político en el Senado.

Acusado de haber incitado a la invasión del Capitolio el 6 de enero, al expresidente republicano no le ha sido fácil constituir el equipo que lo defenderá. Tras la deserción de cinco juristas este fin de semana, y a solo ocho días del comienzo de su proceso, confió finalmente la tarea a Bruce Castor y David Schoen.

Pese a no ser figuras de primera línea, ambos letrados ya han copado titulares y podrían garantizar el espectáculo durante unas audiencias que serán retransmitidas en directo en todo el país.

Establecido en Alabama, el penalista Schoen se ha vanagloriado en el pasado de haber defendido a «todo tipo de gánsters», incluidos los jefes de la mafia rusa o italiana.

Entre sus clientes más famosos figura Roger Stone, amigo de larga data de Trump. Condenado por «perjurio» durante la investigación rusa, este autoproclamado especialista en «golpes bajos» de la política fue finalmente indultado por el presidente justo antes de dejar el poder.

Aunque Schoen ha dado mucho de qué hablar sobre todo tras la muerte del multimillonario Jeffrey Epstein en agosto de 2019.

El letrado aseguró haber sido contratado para defender al financiero, acusado de explotación sexual de menores, y de haberle visitado antes de que apareciera colgado en su celda. «No creo que sea un suicidio», afirmó entonces al Atlanta Jewish Times.

Ante este tipo de especulaciones, la policía federal y Departamento de Justicia abrieron investigaciones, pero los resultados de la autopsia confirmaron el suicidio. «Todavía pienso que fue asesinado», repitió Schoen en septiembre.