Los 39 equipos de LaLiga, que no fueron invitados a la Superliga, rechazaron de forma unánime y contundente la creación de la competencia.
“Todos los clubes creen firmemente en el mérito deportivo como único criterio para poder clasificarse para las competiciones internacionales de clubes a través de las respectivas ligas nacionales”, indicó LaLiga.
Consideran que una liga europea cerrada y elitista es “inviable y no deseada”.
LaLiga señaló que los aficionados pueden soñar con que su equipo puede destacar en una competición, llegar a lo más alto y competir en la cumbre del futbol europeo.