El 50 por ciento del agua potable que se distribuye a los hogares en Tamaulipas se pierde por fugas
La Comisión Estatal del Agua en Tamaulipas (CEAT) urgió a los organismos operadores de agua potable que prioricen las obras de rehabilitación de infraestructura hidráulica en los municipios.
Las pérdidas se deben a la falta de mantenimiento en la infraestructura por parte de los organismos operadores del agua, que dejaron de atender desde hace algunos años, advirtió Luis Javier Pinto Covarrubias, director de la CEAT.
El porcentaje de pérdida de agua es del 50 por ciento del líquido que, una vez que es potabilizado se destina a las tuberías para el consumo de las casas y de la industria de cada municipio de la entidad, que en algunos casos llega a ser mayor que esta cifra.
“La realidad es que el porcentaje de agua que se pierde es del orden del 50 por ciento y en algunos casos excede el 50 por ciento; por ello se está haciendo una recomendación a los gerentes de los organismos operadores para atender ese problema”.
Dijo que si bien las COMAPA´s tienen algunos proyectos para mejorar el abasto del agua, lo conveniente es primero dar atención a la red de agua potable, pues la mayoría son instalaciones que ya tienen muchos años y requieren de mantenimiento.
“Se comenta que hay algunos proyectos que pudieran ser alternativos para mejorar el abasto pero son proyectos de inversión muy elevados, lo primero que se tiene que hacer es en la infraestructura de la ciudad para dejar de perder volúmenes de agua que son necesarios y tener mejor presión”, dijo.
Aseguró que por estas fugas de agua potable se pierde hasta el 50 por ciento del vital líquido y que en temporada de calor se hace más evidente, toda vez que el consumo aumenta, sumándole a ello la falta de lluvias lo que no ha permitido que los mantos acuíferos recuperen sus niveles.
Pinto Covarrubias recordó que durante el 2019, la CEAT consiguió un total de 360 millones de pesos para obras de infraestructura hidráulica, pero insistió en que es necesario que los organismos operadores eficienticen sus sistemas de recaudación y distribución de agua en la red, pues ninguno de los tres órdenes de Gobierno tiene los recursos a la mano para hacer esas inversiones que permitan mejorar la condución del agua.
