Tras la extinción del Seguro Popular ahora el Instituto de Salud para el Bienestar (INSABI), alrededor de 230 trabajadores en Tamaulipas se encuentran en la incertidumbre, pues no se les han dado garantías para recontratarlos o finiquitarlos.
Durante la mañana de hoy un grupo de trabajadores sostuvieron una reunión con la secretaria de Salud, Gloria Molina Gamboa en donde se les informo de los pocos lineamientos que ha emitido el Gobierno Federal sobre el nuevo programa.
“No tenemos definiciones, no hay techos presupuestales, no tenemos tabuladores lo único que sabemos es un oficio del 30 diciembre firmado por Juan Antonio Ferrer, en donde los afiliadores se contratarán como promotores y toda la rama de gestión se contratara en los centros médicos de salud en sonde nos hagan falta”, explicó.
Tras la reunión con la secretaria de trasladaron a la plaza Juárez en donde denunciaron ante los medios de comunicación la falta de sensibilidad por parte de las autoridades estatales y federales para atenderlos
Acusaron al Gobierno Federal de bajar información a cuenta gotas y mantenerlos en la incertidumbre laboral al no informarles debidamente.
Y es que el pasado 31 de diciembre concluyó su contrato con la desaparición del Seguro Popular sin que ninguna autoridad les informara cuál sería su situación.
Los inconformes reclaman el pago de un finiquito, ya que hasta el momento ninguna autoridad se ha hecho responsable.
“Si no tienen una información relevante porque traer de los diferentes municipios; nos estamos costeado los gastos para acá para una información de que no se tiene nada”, señaló un manifestante.
Daniel Alejandro Zarate Castro, uno de los manifestantes, señaló que cuando se termina un programa se debía entregar un finiquito, pero “nos dicen no puede existir porque el seguro popular ya no existe”.
“Lo único que pedimos es que se nos diga la verdad que no se nos haga venir por venir y que si hay trabajo que nos digan”.
Mencionó que Molina Gamboa solo les adelantó que podrían ser recontratados, pero como promotores de la salud y con un salario más bajo del que percibían.
Además, el ofrecimiento es para ser ubicados donde se requiere, principalmente en los municipios del quinto distrito.
Los inconformes, entre los cuales algunos tienen hasta 10 años de antigüedad, adelantaron que presentarán una denuncia contra quien resulte responsable.