Las Fuerzas Armadas venezolanas se declararon en “alerta” para evitar una violación del territorio ante la pretensión del opositor Juan Guaidó de hacer entrar el sábado ayuda humanitaria acopiada en Colombia, Brasil y Curazao, isla cuya frontera marítima y aérea cerró ayer.
El director de Protección Civil del Estado de Falcón, Gregorio José Montaño, confirmó que desde ayer entró en vigencia una regulación que prohíbe la comunicación marítima entre Venezuela y las islas caribeñas que están frente a las costas venezolanas.
Montaño expresó que la decisión fue acordada por el presidente Nicolás Maduro y agregó que “no hay fecha de apertura”.
La medida afecta las actividades de vuelos comerciales y privados entre Venezuela y las tres islas, así como tráfico de embarcaciones.
El cierre de la frontera marítima y aérea se da en momentos de una intensa pugna entre la oposición y el Gobierno, que enfrenta crecientes presiones locales e internacionales, y a cuatro días del inicio de un plan que impulsa la Asamblea Nacional, de mayoría opositora, para ingresar al país ayuda humanitaria internacional.
A pesar de las tensiones entre el Gobierno y la oposición desde mediados de enero de este año, el ministro de la Defensa de Venezuela, general en jefe Vladimir Padrino López, descartó que los militares vayan a ceder a las presiones internacionales y ratificó el respaldo de las Fuerzas Armadas a Maduro. Padrino López condenó el pronunciamiento que realizó el presidente Donald Trump, en el que exhortó a los militares a apoyar al jefe de la Asamblea Nacional y líder opositor, Juan Guaidó, quien se declaró mandatario interino de Venezuela.
“Si nos quieren sancionar, sancionen. Si nos quieren chantajear, chantajeen, pero no lo van a lograr”, sostuvo el jefe militar al advertir que los uniformados no aceptarán la imposición de un Gobierno “títere”. “Van a tener que pasar por nuestros cadáveres”, agregó.
Trump advirtió el lunes a la tropa que si sigue respaldando a Maduro “no encontrarán puerto seguro, ni una salida fácil, ni forma de escapar”.
Padrino López y algunos integrantes del alto mando militar fueron sancionados entre 2017 y 2018 por Estados Unidos como parte de una larga lista que incluye más de medio centenar de funcionarios venezolanos.
