Al menos una persona murió debido al fenómeno conocido como «bomba ciclónica», una combinación de aire frío y húmedo, fuertes nevadas y vientos huracanados, que azota al centro de Estados Unidos y que llevó al gobernador de Colorado, Jared Polis, a declarar el estado de emergencia.
El agente de la Patrulla Estatal de Colorado, Daniel Groves, de 52 años, murió atropellado por un auto que perdió el control en la carretera, mientras las autoridades reportaron 125 accidentes viales y llamaron a la población a mantener la cautela en caso de que necesiten salir de sus casas.
Debido a la tormenta, el aeropuerto de Denver, considerado entre los más importantes de Estados Unidos, cerró sus seis pistas y canceló más de mil vuelos, mientras que las escuelas, oficinas gubernamentales y algunas empresas de los siete condados estatales suspendieron actividades por el mal tiempo.
Asimismo, unas 400 mil viviendas se quedaron sin electricidad debido a las nevadas y los fuertes vientos, reportó la empresa de servicios públicos Xcel Energy Colorado.
El estado ha registrado ráfagas de hasta 130 kilómetros por hora, que es equivalente a un huracán de categoría 3, reportó la cadena Telemundo.
El servicio meteorológico pronosticó que el mal tiempo continuará hasta el viernes en grandes franjas del centro de Estados Unidos.
Las advertencias por tormenta de nieve se extendieron desde el este de Colorado y Wyoming, partes de Nebraska y una gran porción de las Dakotas hasta el oeste de Minnesota, mientras que el este de Nebraska, el sureste de Dakota del Sur y algunas zonas de Iowa se encuentran bajo alerta por inundaciones.