El Gobierno de Nicolás Maduro anunció este sábado que prevé reunir 13 millones de firmas en rechazo al bloqueo de bienes estatales venezolanos en suelo estadounidense ordenado esta semana por el presidente Donald Trump.
Vamos por más de 13 millones de firmas solamente en la patria venezolana», dijo el ministro de Comunicación, Jorge Rodríguez, durante una manifestación oficialista en Caracas contra la sanción estadounidense.
El ministro explicó que esperan recolectar las rúbricas hasta el 10 de septiembre para posteriormente llevarlas ante la Asamblea General de la Organización de Naciones Unidas (ONU).
Indicó también que habrá recolección de firmas en «el mundo entero» y que todos estos apoyos irán a la ONU junto a una «carta de repudio al genocida, al racista, al xenófobo», en alusión al mandatario estadounidense.
En la misma manifestación, Maduro estampó su firma junto a su esposa, Cilia Flores, y aseguró que el chavismo ya había «empezado a recolectar millones» de apoyos.
El gobernante calificó como «inmensa, monumental y hermosa» la jornada de «protesta mundial contra Donald Trump» que él mismo convocó para este sábado en rechazo al bloqueo.
Victoria de los pueblos del mundo contra Donald Trump y su política de agresión imperialista (…) agradecemos al mundo entero el apoyo y la solidaridad», expresó el líder chavista.
A lo largo del día, el canal estatal VTV ha mostrado imágenes de manifestaciones similares en varios estados del país caribeño.
Entretanto, la Cancillería venezolana ha publicado decenas de mensajes que dan cuenta de actividades organizadas por las embajadas en apoyo a la llamada revolución bolivariana y en rechazo al bloqueo estadounidense.
Los apoyos al chavismo también se han manifestado a través de conversatorios y comunicados de organizaciones políticas afines al Gobierno venezolano.
Además, varios dirigentes sociales y líderes políticos se han sumado a la «protesta mundial» como el presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, quien compartió un texto de respaldo a Maduro, su aliado, y pidió a EE.UU. tener sus «manos fuera de Venezuela».
Venezuela atraviesa un agravamiento de tensión política desde el pasado enero, cuando Maduro juró un nuevo mandato de seis años que no reconoce la oposición y parte de la comunidad internacional, debido a que el gobernante obtuvo la reelección en unos comicios en los que se prohibió participar a los principales líderes opositores.
En respuesta, el jefe del Parlamento, Juan Guaidó, se proclamó como presidente interino de Venezuela y consiguió el apoyo de más de cincuenta naciones, con Estados Unidos a la cabeza.