Veracruz prácticamente hundido en la tabla de cocientes y último en la general, no sólo quiere sumar ante el Cruz Azul, ya que también aspiran a por lo menos anotar un gol.
Los escuálos de Robert Dante Siboldi, llevan 630 minutos sin mecer la red rival, objetivo primordial que se plantean los del Puerto.
Del otro lado, los de La Máquina tienen que lavar su imagen y parece que se les presenta el rival a modo, sobre todo luego de la eliminación en Copa ante Alebrijes de Oaxaca, resultado que le metió presión a Pedro Caixihna, acutal técnico cementero.
El Veracruz llega de perder 3-0 ante Tijuana, un partido en donde se quedaron con uno menos desde el minuto 7 por la expulsión de Édson García, y pese a que parecían por momentos con más posesión del balón, la falla de un penal en los pies de Christian Menéndez al 22’ los desestabilizó y agudizó la crisis de los veracruzanos.
Cruz Azul llega lastimado, atravesando el peor momento después de que el torneo pasado fueron pocas las fechas que dejaron el liderato, algo no está funcionando, su afición ya lo notó y de a poco se va notando su inasistencia al estadio, en el partido del sábado pasado se notó el abandono. Su entrenador, Pedro Caixinha, admite que la escuadra se encuentra en una etapa difícil: “Es el momento más complicado como entrenador del Cruz Azul”, dijo el lusitano, después de la derrota contra Santos. “Hay que tener retos como estos para poder ir hacia delante. Voy a dar lo mejor de mí para regresar al buen momento que que estábamos. Me lo propongo”. Ambos se verán la cara en Luis “Pirata” Fuente a las 21:00 horas.