Estados Unidos anunció el jueves nuevas sanciones a los gobiernos de Venezuela y Cuba, a la vez que prometió nuevas penas al de Nicaragua. El asesor de seguridad nacional de Trump, John Bolton, aseguró que esos tres gobiernos latinoamericanos representan la «troika de la tiranía» y «fuerzas destructivas de opresión, socialismo y totalitarismo».
En un discurso en Miami, donde viven miles de exiliados de los tres países, Bolton dijo que Estados Unidos «dejará de aplacar dictadores y déspotas cerca de nuestras fronteras en este hemisferio». Habló en la Freedom Tower, un edificio emblemático para la comunidad cubana.
El gobierno prohibirá a los ciudadanos estadounidenses participar en el negocio de exportación de oro de Venezuela. Los funcionarios estadounidenses dicen que el presidente venezolano Nicolás Maduro exportó ilegalmente 21 toneladas de oro a Turquía para evitar las sanciones y tratar de rescatar a una economía desfalleciente que antes se sostenía con sus enormes reservas petroleras.
Washington ha sancionado a decenas de altos funcionarios venezolanos, Maduro entre ellos, como parte de unas medidas económicas para presionar al país sudamericano y lograr su regreso a la democracia.
Bolton culpó a Cuba por sostener el gobierno de Maduro y exhortó a los países de la región a «hacerle saber al régimen cubano que se le considerará responsable por la continuidad de la opresión en Venezuela».
En claro contraste con la política hacia Cuba del anterior presidente Barack Obama, Bolton dijo que el Departamento de Estado ha agregado una veintena de entidades de propiedad de las fuerzas armadas cubanas o controladas por éstas a una lista de entidades con las cuales los estadounidenses no pueden realizar transacciones financieras.
Bolton dijo que el objetivo es impedir que lleguen dólares a las fuerzas armadas y los servicios de seguridad e inteligencia de Cuba.