La edad en la que los hombres son más propensos a padecer el cáncer testicular es entre 20 y 30 años, sin embargo, este padecimiento es altamente tratable.
Expertos del Houston Methodist Hospital indicaron que se trata del cáncer más común entre los hombres de entre 15 y 34 años de edad, siendo 33 el promedio de edad para el diagnóstico.
En México, el cáncer testicular es la segunda causa de ingreso al hospital en la población masculina de 15 a 19 años al egresar por dicha afección 12 de cada 100 mil varones de ese grupo etario.
En tanto, en los hombres de entre de 20 y 39 años, los tumores malignos de testículos son los de las tasas de morbilidad más altas (22.25 de cada 100 mil en población de 20 a 29 años de edad y 14.17 entre los 30 y 39).
Neel Srikishen, urólogo del Houston Methodist Urology Associates, indicó en un comunicado, que los hombres con antecedentes familiares de la enfermedad o un testículo no descendido son los más proclives a ser diagnosticados.
«Sin embargo, los hombres de todas las edades deben estar atentos al cáncer testicular, hacerse autoexámenes e informar los cambios a sus médicos. Incluso si los testículos no duelen, la hinchazón o un bulto en ellos, son motivo de preocupación».
La inflamación indolora es el síntoma principal del cáncer testicular, pero en algunos casos, el bulto o la inflamación causan dolor.
Otra de las manifestaciones es el dolor en la parte inferior del abdomen o la ingle o una acumulación repentina de líquido en el escroto.
Los especialistas subrayaron que los hombres deben conocer el aspecto y la sensación habituales de sus testículos.
Abundaron que es normal que los testículos tengan diferentes tamaños o que uno cuelgue más bajo que el otro y lo que pueden sentirse como bultos en realidad pueden ser vasos sanguíneos o tejidos. Sin embargo, recomendaron realizarse autoxámenes y estar atentos ante cambios en el tamaño, la forma y la consistencia.
También sugirieron acudir con el médico dentro de las dos semanas posteriores al notar cualquier cambio sospechoso, y agregaron que hay un pronóstico esperanzador para el cáncer testicular localizado, pues la tasa de supervivencia a cinco años es del 99 por ciento.